Recuerda

0 comentarios
 


Comenzó con piar de pájaros y pasaron a un vals de circo, lleno hasta la bandera de enanos de mirada maliciosa y labios pintados de rojo... medio travestidos medio simples empleados obstinados en seguir hundiendo la empresa mes a mes... como cualquier español. Eso me sugiere Antònia Font

Cambié la música, no podía escribir nada serio con eso de fondo. O mejor, decidí cambiar. Pero mi cabeza no respondía al ritmo marcado por el deseo, así que saltó la cosa a Armando Rampas. Me gustó... ya conocía el disco de meses atrás, pero me dio su puntillo la canción en ese preciso momento. Terminé sumergido en un monasterio con unos tipos empeñados en meterme por la garganta no sé qué tipo de espiritualidad con rebaja fiscal incluida, Swans.

Pero no quería hablar de todo esto, sino del tipo que anda con un ratón como mochila a la espalda. Ni Aurelio Ayela ni Martín Azúa, demasiado sencillo, fin de juego obvio, obsolescencia programa ya en el mismo entretenimiento... demasiado lejos hemos ido. El caso es que andaba preguntándome cómo de útil había sido a la sociedad ese día. Ya sabes, esos extraños juicios morales que se celebran a oscuras, en la intimidad de la cama. Las imágenes alteradas por nuestros propios intereses se suceden mientras podemos cambiar hasta dos o tres veces de cargo: ¿he sido feliz?, ¿qué me ha aportado de positivo el día?, ¿he actuado correctamente?...

¿Qué tipo de ratón cargo a la espalda?, ¿qué tipo de ratón soy?, ¿qué tipo soy?, ¿qué?

He recibido una correo de una chica a la que conozco poco pero que siempre me ha transmitido buenas sensaciones, hacía tiempo que no sabía de ella y comentaba algunas fotos del blog y ciertos emociones que terminaron por salir, sobre todo porque estaban ahí dentro, pero también algo catalizaba lo que veía y leía, creía ver y creía leer. Pero lo que me ha hecho levantarme de la silla lleno de inquietud ha sido imaginar la cara del enano travestido, no medio, travestido.

Es broma.

La impresión que he sentido ha sido de rayo paralizante. Imagina que un rayo recorre la distancia entre tu ceja izquierda y el omoplato derecho (sin cirugía, bordeando) a 17 lunares el intervalo entre que empiezas a abrir el ojo y alguien lo besa porque realmente se siente agradecido de tanta belleza como le das. Pues como 5 o 6 lunares más. Así es un rayo paralizante. Y aunque no consiga entender cómo hace la frenada y la wikipedia se piensa si aumentar el tamaño de la letra del texto "Se busca editor, friki, leído y con adsl 3/256 o superior" que aparece en la entrada... me pregunto si es el momento de explicarte el título de la entrada.

Recuerda. La música y los enanos, tipos con ratones a su espalda y dudando de quién es el tipo y quién el ratón, amigas fotos y emociones, rayos paralizantes y la web 2.0.

Me llamo Guillermo, soy el tipo del ratón a la espalda, escucho a stars of the lid, cierto que me cae bien Montse, cierto que no me interesa la fotografía sino la belleza y me ayudo de un radar privilegiado que capta lo lindo que hay en los rincones, y los rincones que está bien que sigan siendo rincones y no avenidas, y todavía más cierto que cuando decías que te has puesto a llorar poco me ha faltado para acompañarte, me sentía feliz por entrar en tu mundo de pequeños y grandes sentimientos aunque sólo fuera como incómodo invitado. Me alegro de que de alguna forma hayamos compartido ese momento.

Recuerda. Música, belleza, emociones, compartir.

Recuerda qué recordar y qué olvidar, y que todos llevamos un ratón a la espalda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
© 2012. By Main-Blogger - Blogger Template and Blogging Stuff